La presión atmosférica puede ser afectadas por muchos elementos y en función de ello experimentar diferentes lecturas. Es decir, de acuerdo a los agentes externos que la afectan, podremos observar una disminución o elevación de la presión atmosférica.
Cabe destacar, que la lluvia también es un elemento modificador de la presión atmosférica. Por lo que si prestamos atención a los días lluviosos podremos advertir una variación del fenómeno de la presión atmosférica. Pero vamos a indagar un poco más en el tema.
¿Qué es la lluvia?
Al igual que la presión atmosférica, la lluvia es un fenómeno meteorológico, es decir, ocurre como parte de los ciclos climáticos que experimenta el planeta. Si nos remitimos a sus causas, encontraremos que el efecto de los rayos solares tiene mucha influencia en ello. De esta manera, el calor evapora el agua de los ríos, aguas y océanos haciendo que este vapor se eleve. Una vez alcanzada cierta altitud y temperatura, el aire se condensa y el peso del agua hace que descienda a la superficie.
Origen de la humedad atmosférica
La humedad se presenta por acción de la lluvia, para entender este proceso debemos saber que no toda el agua que se evapora sube hasta convertirse en nubes. Por el contrario, una buena cantidad se queda cerca de la superficie en forma de rocío. Un fenómeno parecido sucede con el agua que desciende, que al evaporarse antes de llegar a la superficie vuelve a ascender.
Podemos decir entonces que la humedad es relativa a la evaporación del agua y a las precipitaciones. Asimismo, la humedad influye de muchas maneras en la vida de las personas. Cabe destacar que en algunos casos puede ser positivamente y en otros no tanto. Teniendo implicaciones en la salud y en los objetos de los cuales hacemos uso.
Implicaciones de la lluvia y la humedad en la presión atmosférica
La presión atmosférica es afectada por toda esta cadena de fenómenos que se derivan como producto de la evaporación del agua. El primero de ellos es la alteración de la composición del aire.
En otras palabras, se experimenta un incremento del vapor de agua y una disminución de los otros elementos. Lo que vamos a encontrar es que al haber mayor cantidad de vapor de agua, la densidad del aire disminuirá. Esto ocurre debido a que el vapor de agua es menos denso y en consecuencia también afecta la presión atmosférica disminuyéndola.
Dicho de otro modo, la presión atmosférica es afectada por la lluvia y la humedad haciendo que esta disminuya. Lo que quiere decir, que las zonas que experimentan mayor presencia de lluvia y humedad advierten menor presión atmosférica. No obstante, es importante considerar otras variables como la temperatura, la latitud, la altitud, entre otros.
En conclusión, una zona o espacio geográfico puede estar afectado por muchas variables y todas ellas pueden estar coincidiendo para incidir en la presión atmosférica. Lo importante de ellos es saber cuáles son esas circunstancias bajo las cuales se hacen presente. Asimismo, determinar cómo pueden afectar el desarrollo de nuestras actividades.